¿El quebrantamiento es un requisito para la conversión?

Pregunta: Hace tiempo que trato de llegar a una buena relación con Dios, y creo que conseguí tenerla. Pero no estoy seguro de si renací o no. Pues no tengo realmente un corazón profundamente quebrantado. Es verdad que tengo hambre de la palabra de Dios, pero me falta la certidumbre de ser Su hijo. ¿Qué debo hacer?

Respuesta: Usted comete un error al decir y repetir que todavía no está completamente quebrantado. Lograr ese quebrantamiento no es cosa suya. Jesús, nuestro bendito Salvador, fue quebrantado en la cruz por usted, El lo consumó todo por usted. El quitó todos sus pecados; sí, El tomó sobre sí su naturaleza desesperadamente corrupta, habiendo sido hecho pecado en nuestro lugar, como nos lo enseña 2. Corintios 5:21, donde leemos: "Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él." Esta es Su obra por usted. Que usted quede convencido y arrepentido de la dureza de su corazón y de su corrupción, eso es la obra del Espíritu Santo. Esta obra es efectuada en usted para que finalmente confíe en la obra del Señor Jesucristo. En un himno dice: "Ya no puedes hacer nada, pues El lo hizo todo: ¡Consumado está!" Venga tal como usted es, y dígale a El: "Señor Jesucristo, Tú conoces mi corazón. Tú me ves. Tú sabes todo. Pero vengo a ti tal como soy. Y vengo porque tu palabra dice que todo aquel que te recibe a ti, obtiene el poder ser hecho Hijo de Dios; te recibo en mi corazón con fe infantil. Ven ahora a mi corazón, Señor Jesús". Después de haber hecho esto, agradézcale de rodillas el hecho de que El entró como su Señor y hace nuevas todas las cosas. ¿Realmente habrá entrado en tu corazón? Sí, pues El mismo dice en Apocalipsis 3:12: "He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo". El no puede mentir, El también hace lo que dice. Por esto: dé ahora ese paso decisivo, y experimentará las maravillas de Su gracia.