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9 abril, 2018Un trato por el Buen Trato – Parte 2
9 abril, 2018Hoy entrevistamos al psicólogo Alberto Vázquez, director de Un trato por el Buentrato en Uruguay. Te invitamos a conocer más acerca de este movimiento que, a través de adolescentes, sensibiliza a la población acerca del maltrato, e inspira a las personas a tener empatía y no acudir a la violencia.
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EA722 – Entre Amigas –
Un trato por el Buen Trato – Parte 1
Entrevista a Alberto Vázquez
Victoria: Muy bien, es un gusto recibir en esta oportunidad al sicólogo Alberto Vázquez.
Alberto, en esta oportunidad te convocamos para hablar nuevamente sobre Un trato por el Buentrato, un movimiento que tiene ya bastante tiempo en Uruguay, pero que ha tenido trascendencia a nivel internacional Quiero que más o menos nos cuentes cómo trabajan, y de qué se trata este movimiento.
Alberto: Bueno, este movimiento pertenece a un programa que se llama Claves, el cual es parte de Juventud Para Cristo en Uruguay, y la iniciativa nació en el año 2002, como una forma de poder promover otras pautas para relacionarnos de formas diferentes con niños y adolescentes. Queríamos hacer algo con adolescentes y nos preguntamos, ¿qué les gusta a los adolescentes? El tema de los juegos, lo lúdico. Así, consultando y trabajando con algunos adolescentes de un centro juvenil en flor de Maroñas, surgió la idea de decir que la violencia es como una epidemia. Cuando hay una epidemia, uno se tiene que vacunar, a modo de prevención. Si la violencia es la epidemia, ¿cuál sería la vacuna? Así se comenzó a hablar de hacer cosas buenas, de promover el buen trato, y un adolescente dijo: “bueno, la vacuna tiene que ser la antipegánica”. Entonces ahí surgió, medio en broma, la idea de la vacuna, de hacer una vacunación simbólica, donde cada adolescente le pueda entregar al adulto, a modo de sensibilización, un certificado de vacunación, donde lo invita a comprometerse a promover esta cultura del Buentrato, un autoadhesivo, y un caramelito de miel que es como la dosis oral de la dulzura.
Así empezó el movimiento, comenzaron a surgir las capacitaciones, y se empezó a desarrollar algo bien chiquitito que hoy ha llegado a 14 países de América Latina. Cada año aquí en Uruguay participan unos 3000 adolescentes en 13 departamentos, se vacunan a 60 mil adultos, y esta campaña tiene una cosa muy interesante, que es que hay dos componentes grandes: Un momento de capacitación, y un momento de sensibilización a la opinión pública. El momento de capacitación es que se invita a todas las organizaciones que trabajan con adolescentes y jóvenes: centros de enseñanza, liceos, UTU, centros juveniles, se los invita a participar de una capacitación del programa Claves que nosotros les damos. Eligen a dos delegados adolescentes, entre 14 y 18 años, de cada organización, y los acompaña un educador, maestro, docente o referente. Así empiezan a participar de estas capacitaciones. Se capacita en el tema de poder pensar cómo son nuestras relaciones, de qué hablamos cuando hablamos de buen trato, de mal trato, y este año especialmente tocamos un tema que tiene que ver con la empatía. Discutimos cómo podemos promover el valor de la empatía, es decir, cómo podemos empezar a pensar y sentir lo que siente el otro. Creo que esto es una de las cosas que nos falta mucho en la sociedad y en la convivencia, el tener sensibilidad ante la situación a la que está enfrentando el otro, y nos solo preocuparme por mí mismo. Entonces se les capacita en esta temática, y también en un área artística. Hay talleres de maquillaje artístico, malabares, payasos, recreación, diferentes maneras en las que el adolescente puede llamar la atención en la calle y puede acercarle este mensaje de sensibilización al adulto. El adolescente se acerca y dice: “somos adolescentes y estamos proponiéndote una forma diferente de relacionarnos. Podemos hacer pequeñas cositas para poder mejorar el trato diario.” Se lo invita a que haya un trato por el Buentrato y comprometerse a: En la relación con los niños y adolescentes, demostrarles mi reconocimiento por algo bueno que hayan dicho o hecho, expresarles mi cariño con un gesto, cocinar algo rico todos juntos, y dedicar tiempo para que me enseñen un juego. ¿Por qué estos consejos? Porque nosotros creemos que el maltrato y el buen trato comienza en la casa de cada uno. En la convivencia diaria de la pareja, del matrimonio, del hogar, de la relación entre los hermanos, es ahí donde se juega el verdadero partido del buen trato y el maltrato. Cada acción va dejando una marca. El lema de este año es “Tus gestos dejan marcas”. Está estudiado que lo visual nos llega mucho más fuerte que la palabra, y si uno se pone a pensar en qué cosas recuerda de cuando era niño, tiene que ver con eso, con gestos, con acciones.
Nuestro cerebro tiene un sistema de pensar que se va categorizando. Nosotros aprendemos algo y almacenamos esa información. Eso es muy útil la vida diaria, pero también tiene una contraindicación, que nuestros pensamientos se rigidizan y tendemos a hacer siempre lo mismo. Y, de alguna manera, nosotros vemos lo que conocemos. Entonces muchas veces el maltrato está delante de nosotros y no lo logramos ver porque no lo conocemos como tal. Porque está naturalizado que nos insultemos, que estemos a las piñas o a los golpes como un modo de educación. Por eso es que debemos empezar a conocer para poder ver. Así uno puede empezar a cuestionar algunas formas de relacionamiento que tenemos. Este es el mensaje de la campaña, el buscar tratarnos de otra forma.
Victoria: Alberto, vos decías que nuestro cerebro almacena la información de manera estructurada, y me recordaba a lo que decías al principio de ese valor de empatía que ustedes quieren promover. A veces lo que necesitamos es flexibilizarnos un poco para poder entender a los demás.
Alberto: Exactamente. Nosotros creemos que fuimos creados para estar en relación con otros. Existe un yo porque existe un tú. No hay yo si no hay tú. Y esto a veces nos cuesta entenderlo, que fuimos creados para estar en relación con los demás, entonces todo individualismo, egoísmo, todo aquello que se centra solo en la persona es problemático porque no fuimos creado para eso. Fuimos creados para estar en convivencia. Por eso estamos luchando contra todo un sistema también. Contra el consumismo, contra un sistema de competencia, de individualidad, de hedonismo, donde solo se busca el placer de uno mismo y nada más, entonces lo importante, ayudar a os demás. Y los mismos adolescentes lo destacan, es cuando empiezan a ver a otros adolescentes como ellos que están haciendo algo por otros, para ellos es muy gratificante. Eso también es lo lindo de hacer un movimiento te empatía hacia el otro y poder ayudar, que uno se siente mejor también, como persona y como creación. Y para nosotros el tema de la convivencia y de la empatía es fundamental. El empezar a reconocer que estamos con otros y que convivimos con otros, y respetar esta relación. La convivencia tiene que mucho que ver con los límites y con el respeto por el espacio del otro, por el tiempo del otro. Esto se ve mucho en nuestro país, por ejemplo, con el tema de la contaminación acústica, yo un tiempo tenía dos vecinos que eran bateristas, y los muchachos tocaban a cualquier hora. Este tipo de cosas realmente pueden generar un problema. En esos casos es necesario dialogar sin entrar en un circuito violencia, buscar convivir del mejor modo posible.
Victoria: Sí, uno tiende a la reacción más rápida: enojarse, y eso no contribuye a nada.
Alberto: Bueno, de repente uno se puede enojar, el tema es lo que hacemos con ese enojo. Que no se transforme en una furia, o en una violencia hacia el otro. Ya lo decía Pablo: si se enojan no pequen, que no se ponga el sol sobre vuestro enojo. Está bien que te enojes, pero es necesario que vos lo puedas plantear, que, si es necesario, busques a otra persona que te pueda ayudar. Es pensar en el otro, más allá de nosotros mismos, creo que ese es el gran mensaje, una de las esencias del mensaje cristiano.
Victoria: Me imagino que en todo este tema hay distintas áreas o focos para trabajar, vos hablabas recién del trabajo dentro de la familia, con vecinos, hay varios contextos en los que se pueden tratar estos temas.
Alberto: Sí. Nosotros tratamos de trabajar con los propios adolescentes, en la relación de ellos entre pares, y también en la relación con los adultos. Uno de los temas que trabajamos es la comunicación asertiva, cómo poder decir lo que siento y pienso sin ser violento con el otro, pero a su vez, comunicar lo que realmente estoy sintiendo y pensando. Muchas veces, necesitamos que alguien nos enseñe a salir de nuestra zona, y buscar otras alternativas, otras formas de solucionar las situaciones a las que nos enfrentamos.
Uno de los síntomas que más me preocupan es que tenemos un umbral muy bajo a la tolerancia y la frustración, cualquier cosa que nos frustre, en seguida la largamos. Eso también es un aprendizaje, saber frustrarse, saber que a veces no puedo hacer lo que quiero hacer, a veces tengo que ocupar el segundo lugar, a veces no, pero todo eso requiere de un aprendizaje, y requiere de ejemplos. Muchas veces nos quejamos de los adolescentes de hoy en día, pero, ¿de dónde aprenden los adolescentes? Aprenden de nosotros. Alguien decía: Lo que tus hijos ven en vos, les queda para siempre.
Victoria: Muy bien, te agradecemos por el tiempo que tuviste con nosotros, y te invitamos a una segunda entrevista, en el programa que viene, en la cual profundizaremos un poco más sobre este tema.
Alerto: Buenísimo, gracias a ustedes.