Como manejar nuestras finanzas – Parte 1

Entrevistamos al pastor Rody Marashlian, también director del Colegio y Liceo Bethesda, y graduado de la facultad de ciencias económicas. Discutimos el tema de finanzas basándonos en la Biblia, en el ejemplo de José. Abordamos temas como: ¿qué es un problema económico? ¿qué es administrar? ¿Cómo puedo hacerlo? Te invitamos a conocer y aplicar los consejos recibidos para el manejo de las finanzas.

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EA739 – Entre Amigas –
Como manejar nuestras finanzas – Parte 1

Entrevista a Rody Mashalian

Victoria: Queridas amigas, ¡qué gusto compartir este tiempo con ustedes! En esta oportunidad tenemos la visita de un amigo, el pastor Rody Marashlian, es director del Colegio y Liceo Evangélico Bethesda, y pastor de una de las congregaciones de la Iglesia Evangélica Armenia. Hoy va a estar compartiendo con nosotros el tema del manejo de las finanzas con principios cristianos. Le damos la bienvenida, muchas gracias por estar con nosotros, y bueno, queremos escucharte.

Rody: ¿Qué tal Victoria? Es un placer estar nuevamente en este programa, en el cual he compartido también en otras ocasiones con ustedes y con las amigas, y es un placer tratar un tema que a mí personalmente me encanta. Desde chico me gustaba cuando había que juntar plata o hacer la tesorería de pequeñas actividades. Hice la facultad de ciencias económicas y siempre me atrajo. Mi trabajo actual también es básicamente como administrador y realmente creo que es muy importante hablar de las finanzas en un mundo donde el manejo del dinero es tan necesario, tan esencial, para las necesidades diarias. También es importante saber que la Biblia y el cristianismo tiene este tema como un tema que se debe tratar con agilidad, un tema que se debe de tratar con corrección, porque a veces tenemos conceptos equivocados y que no nos ayudan.

Victoria: Exacto. En cuanto al tema del concepto en las finanzas y la economía, la Biblia también tiene respuestas en esa área. A veces manejamos muchos conceptos como si los conociéramos y ni sabemos bien de qué estamos hablando.

Rody: Sí, algunos cada vez que hablan de la Biblia transforman todo a un tema muy místico, pero en realidad la Biblia abarca y toca todos los temas que tienen que ver con el quehacer humano, con la vida del ser humano, y ni que hablar de las finanzas. La Biblia habla mucho del manejo del dinero. Y aquellos oyentes que están escuchando, si no sabían que la Biblia habla de plata, tómese estos minutos para revisar algunos de los temas que vamos a estar abordando.

Victoria: En tantas oportunidades vemos a la gente agobiada, deprimida por los muchos problemas económicos que tienen. ¿Qué es eso? ¿Qué es un “problema económico”?

Rody: Bueno, esa pregunta está muy buena, porque no hay quién no tenga un problema económico. Tener un problema económico no significa solo que las cosas nos están yendo mal. Las personas piensan que, si a una persona le va mal, recién ahí tiene un problema económico. Pero, al que le va muy bien, ¿tiene un problema económico? Claro que sí. ¿Por qué? Porque lo que tiene que resolver es una cuenta: tengo tantos ingresos, tengo tantos egresos, me sobra, me falta, es un problema económico. Es como cuando la maestra les dice a los niños que resuelvan una situación problemática. En realidad, el problema económico es eso. Nosotros tenemos recursos económicos limitados, y, por otro lado, tenemos que saber administrar esos recursos porque también tenemos una serie de necesidades.

Victoria: Recursos limitados. Qué importante, ¿no? Poder entender que los recursos económicos son limitados, por más que muchas veces pueda parecer que aparecen soluciones de un lado o del otro.

Rody: Claro. Para que todos los oyentes puedan comprender esto, quiero solo definir dos cositas. Cuando nosotros hablamos de problemas económicos, en primer lugar, tenemos que ver estas dos cosas: Primero, todos tenemos necesidades. Distintas necesidades. Algunos necesitan ropa, otros necesitan una casa, otros quieren cambiar la bicicleta por una moto, otros necesitan ponerse lindos o lindas, arreglarse, y tienen que gastar en cosméticos, en peluquería, otros tienen problemas de salud, son distintas necesidades que debemos afrontar. Por otro lado, tenemos recursos con los cuales podemos contar para hacer frente a esas necesidades, pero en realidad todos los recursos que tenemos son limitados. Yo me atrevo a decir que, si existe un recurso que, por ahora, es ilimitado, es el aire. El aire parecería que todavía no nos lo están cobrando. Pero yo no sé cómo va a seguir la cosa, quizás dentro de un tiempo para el consumo de aire tengamos que abonar algún tipo de cuota. Hoy por hoy todavía sería el recurso ilimitado. Pero todo lo demás son recursos limitados, y que todos disponemos o no disponemos, tenemos más o tenemos menos. Entonces, el problema económico es: debo encontrar el equilibrio seleccionando y priorizando las necesidades que voy a atender con los recursos limitados que dispongo. Es allí donde yo digo: bueno, tengo tanto. ¿En qué voy a gastar o utilizar estos recursos? Es lo mismo que ese deportista que empieza a correr una maratón. Si gasta todos sus recursos y todas sus fuerzas en los primeros kilómetros, es probable que en los próximos kilómetros se canse y no llegue a la meta. Y uno ve que hay otros que empiezan a trotar despacito, van administrando sus fuerzas, y logran exitosamente completar el recorrido. Es lo mismo con el dinero o con las finanzas. Porque no es solo dinero, a veces tenemos otro tipo de recursos como el canje, los bienes que tenemos, etcétera.

Victoria: Con respecto a administrar, que tiene muchísimo que ver con lo que venimos hablando. ¿Qué es administrar? ¿Se trata de enfrentar el problema económico y buscarle una solución? ¿O se trata de algo más complejo?

Rody: Para todas las amigas, definir la palabra administrar es muy importante. Porque hay personas que piensan que es solo para algunos, pero en realidad, si nosotros tenemos que definir administrar podemos decir que, según el diccionario de la Real Academia Española, administrar es cuidar, gobernar, regir. Y puede ser que nuestras amigas sean grandes administradoras. Hay que reconocer que hay muchas mujeres que son excelentes administradoras. ¿Qué hace la administradora? Cuida, gobierna, rige. Una definición más completa podemos decir que es: prever, pensar en qué es lo que puede pasar, organizar, para preparar todo para esos sucesos que van a venir. Si yo se que dentro de dos semanas tengo que pagar un recibo de UTE no puedo gastar todo hoy. Para eso tengo que mandar, tengo que dar órdenes para que eso se cumpla, coordinar todo, y a su vez controlar. Para ser un buen administrador hay que saber controlar. Y el problema que pasa en la mayoría de las familias del mundo es que hacen un montón de cosas bien, pero cuando llega el momento de controlar, no controlan.

Nuestras amigas pueden estar seguras de que hay muy buenas administradoras mujeres. A veces el hombre quiere ser el que maneja la plata, pero hay muy buenas administradoras.

La definición de administrar básicamente tiene tres conceptos importantes. El primero, es uno que mira para adelante, prevé lo que va a pasar.  En función de lo que va a pasar, yo puedo definir que hago con lo que tengo hoy, o cuánto tengo que ahorrar. Porque hay muchos que empiezan a gastar y piensan que cualquier cosa, pueden sacar un crédito. Y está bien la utilización del crédito, pero no puede ser una utilización desmedida, porque yo no sé qué es lo que puede pasar conmigo en el futuro. Entonces debo tener un resguardo. Cuántas personas viven corriendo para poder pagar sus deudas porque no fueron conservadores, no previeron ciertas cosas que pueden llegar a suceder, y entonces se encuentran con una dificultad para enfrentar las obligaciones que contrajeron. Así que tengo que prever.

El segundo concepto importante era que una vez que se a dónde quiero llegar, empiezo a organizar, mandar, coordinar todas las cosas. Por ejemplo, le digo a mi hijo: no gastes esto, o no vayas a hacer esto para que podemos pagar aquello. Y, lo más importante, lo que más cuesta, es que una vez que se van desarrollando esos planes que hicimos, normalmente nunca se controlan. Hay una frase que muchos la dicen: “yo no sé en qué se me va la plata.” Y, ¿por qué no lo saben? Porque no controlan. No guardan los papeles, no guardan las boletas, no guardan los papelitos de los gastos, no se sientan, aunque sea una vez a la semana, para ver en qué gastaron. Hay tantas veces que nos sentamos frente al televisor. ¿Qué cuesta sentarse con los papeles sobre una mesita y charlar, ordenarse, controlar en qué se nos va el dinero? Esto es algo muy importante dentro del seno familiar.

La misma Biblia tiene estos principios. Hay un ejemplo, en una historia del Antiguo Testamento, donde hubo un gran previsor, y ese fue José. Fue un gran gobernante, la historia misma lo marca, y hay una frase que surge de la Biblia que la usa todo el mundo: “tiempo de vacas gordas, y tiempo de vacas flacas”. En realidad, surge de un sueño que interpretó José, y que permitió que toda una tierra, un Imperio como el de Egipto, hiciera frente a una gran hambruna. Su buena administración permitió que el Imperio de Egipto fuera el que proveyó alimento a todos los pueblos que estaban a su alrededor, y por lo tanto se enriqueciera mucho, porque cuando hubo tiempos de vacas gordas, cuando había mucha producción, guardó y almacenó. Y cuando vino la falta de alimento y de provisión, ellos tenían, y a los demás les faltaba.