Señor, estoy herida

La experiencias traumáticas y dolorosas pueden afectar, amargar y paralizar las vidas para siempre. Sin embargo, es posible sanar las heridas que nos fueron infringidas y volver a una vida plena y proactiva. Silvia Plock estudió a fondo este tema a la luz de la Biblia, presentando en este libro un concepto de gran ayuda para el acompañamiento pastoral. Aunque el presente estudio puede ser usado para provecho personal, el énfasis de la obra está puesto en equipar a aquellos que, por medio de la consejería, acompañan a otros en su proceso de sanidad. Después de la «introducción», la cual intenta animar a sus lectores a involucrarse en este servicio, la autora desarrolla el concepto de consejería por medio de algunos sencillos pasos. Además, sus declaraciones son ilustradas con gráficos muy prácticos.

Aunque Sylvia Plock se dirige siempre al público femenino, los conceptos vertidos son válidos para todos los que buscan respuestas bíblicas en el importante y desafiante misterio de la consejería.