PE-2492 | Autor: Wilfred J. Hahn
Los cristianos que levantan la vista para esperar su salvación a veces caen en la trampa del negativismo. Para ellos, todo nuevo avance es negro y digno de condena. ¿No hay nada positivo que podamos elogiar?
Los cristianos que levantan la vista para esperar su salvación a veces caen en la trampa del negativismo. Para ellos, todo nuevo avance es negro y digno de condena. ¿No hay nada positivo que podamos elogiar?
La humanidad está tan obsesionada con el tiempo que lo ha vuelto mercancía de consumo. ¿Qué diremos a eso desde el punto de vista bíblico? ¿Cuál es la relación correcta de un cristiano con el tiempo y las interrupciones?
Lo que caracteriza las emociones e inclinaciones santas se atribuye a dos cosas: primero, que son obradas por Dios; segundo, que tienen a Dios como objeto y centro.
Los redimidos adoran al Padre revelado por el Hijo. Por medio del Hijo conocemos al Padre y, mediante el Espíritu Santo, reconocemos lo que el Hijo significa para el Padre. Todo sale de Dios y, mediante la adoración, vuelve a Él. Recordamos, agradecemos, adoramos y aguardamos el cumplimiento de Dios.
¿Existe un vínculo entre la salvación y la adoración? Reconocemos con exactitud la grandeza de la salvación y del Salvador? Todo depende de Dios y nada de nosotros. Su obrar es soberano; comprender esta verdad produce adoración genuina.
¿Existe un vínculo entre la salvación y la adoración? Reconocemos con exactitud la grandeza de la salvación y del Salvador? Todo depende de Dios y nada de nosotros. Su obrar es soberano, y comprender esta verdad produce una adoración genuina.
En este programa analizamos si el Señor está interesado en los rituales y lugares para la adoración. En el Antiguo Testamento, la adoración siempre está ligada al reconocimiento y sometimiento a Dios, quien nos permite acercarnos a Él.
¿Cuáles son las cosas que creemos imprescindibles al adorar? ¿Se alinean nuestras prioridades a la adoración bíblica? Veremos cómo un corazón vacío puede disfrazarse con acciones externas.
Estudiamos qué es la adoración y la fuente de la expresión en el lenguaje bíblico. Adorar implica una actitud de reconocimiento y poco tiene que ver con las expresiones aprendidas.
Para entender mejor el propósito de la adoración, debemos saber que fuimos creados para alabar a Dios y rescatados para adorarlo. La adoración es nuestra suprema vocación.
Con base en las palabras de Jesús sobre la adoración, entendemos cómo y cuándo se ejerce. Con su venida, la adoración adquirió un carácter distinto mediante la dádiva del Espíritu Santo.
Con base en las palabras de Jesús sobre la adoración, podemos entender cómo y cuándo se ejerce. Con la llegada de Jesús, la adoración adquirió un carácter distinto gracias al Espíritu Santo.
La teología de Martín Lutero estaba centrada en la Cruz de Cristo. Solo a la luz de la Cruz entendemos quién es Dios. Esta no solo altera nuestros conceptos teológicos, sino que revoluciona la ética y la vida cristiana.
La teología de Martín Lutero estaba centrada en la Cruz de Cristo. Solo a la luz de la Cruz entendemos quién es Dios. Esta no solo altera nuestros conceptos teológicos, sino que revoluciona la ética y la vida cristiana.
La teología de Martín Lutero estaba centrada en la Cruz de Cristo. Solo a la luz de la Cruz entendemos quién es Dios. Esta no solo altera nuestros conceptos teológicos, sino que revoluciona la ética y la vida cristiana.
Pocos días antes de su muerte, Jesús habló a sus discípulos en el Monte de los Olivos. Este sermón profético nos ayuda a entender los hechos futuros y nos desafía a compartir el Evangelio con los demás.
Pocos días antes de su muerte, Jesús habló a sus discípulos en el Monte de los Olivos. Este sermón profético nos ayuda a entender los hechos futuros y nos desafía a compartir el Evangelio con los demás.
Pocos días antes de su muerte, Jesús habló a sus discípulos en el Monte de los Olivos. Este sermón profético nos ayuda a entender los hechos futuros y nos desafía a compartir el Evangelio con los demás.
Pocos días antes de su muerte, Jesús habló a sus discípulos en el Monte de los Olivos. Este sermón profético nos ayuda a entender los hechos futuros y nos desafía a compartir el Evangelio con los demás.
Pocos días antes de su muerte, Jesús habló a sus discípulos en el Monte de los Olivos. Este sermón profético nos ayuda a entender los hechos futuros y nos desafía a compartir el Evangelio con los demás.