Convicciones y comunión con Dios

Hablamos con Joscheba y Lisa, dos chicas de Suiza y Alemania respectivamente. Ellas estudian en el instituto bíblico de Palabra de Vida en Argentina, y hoy nos comparten sus testimonios y cómo Dios ha cambiado sus vidas. ¿Quién es Jesús para ti? Joscheba y Lisa responden esta pregunta y nos invitan a que Jesús sea lo principal en nuestras vidas. Nos enseñan que no importa el país, la cultura o el idioma, no importan las circunstancias, si tenemos a Jesús es suficiente.

---

DESCARGARLO AQUI:
EA0892 – Entre Amigas –
Convicciones y comunión con Dios

---

---

Entrevista a Joscheba y Lisa

Victoria: Estamos en Entre Amigas y es un gusto compartir nuevamente este momento de la entrevista. Hoy nos acompañan Joscheba y Lisa, ellas son de Suiza y de Alemania, y están con un grupo de Palabra de Vida acá, así que bienvenidas a Uruguay, bienvenidas a Sudamérica.

Joscheba: Gracias.

Lisa: Gracias.

Victoria: Bueno, cuéntenos un poco de ustedes. Joscheba, ¿de dónde sos?

Joscheba: Yo soy de Suiza, de una ciudad que queda en el norte.

Victoria: ¿Y vos, Lisa?

Lisa: Yo soy de Alemania, del sur. Bien cerca de Suiza.

Joscheba: Sí, vivimos muy cerca, ya nos conocíamos antes de venir acá.

Lisa: Sí.

Victoria: Y no es la primera vez que están acá en Uruguay, ¿verdad?

Lisa: No, yo vine acá en el 2013 con mi hermano y con una familia de Alemania, vinimos para visitar a algunos amigos que tenemos acá y la familia de unos chicos de nuestra iglesia.

Victoria: ¿Y Joscheba?

Joscheba: Yo un año más tarde que Lisa, en el 2014, vine acá a visitar a la familia Eisses, quizás los conocen. Porque en Suiza también voy a la iglesia de Llamada de Medianoche.

Victoria: Así que ya conocías. Les contamos a nuestras amigas que también está Isabelle por aquí con nosotros. Cuéntenos, ¿qué es lo que están haciendo por estos lados? ¿Qué es lo que las trajo? Y ¿Cómo es la primera experiencia de viaje de estudio y de misiones?

Joscheba: Bueno, la primera vez que conocí de Palabra de Vida fue hace dos años, cuando fui con otra familia de la iglesia de Llamada de Medianoche al campamento que tienen en verano. Ahí conocí el programa bilingüe que tienen y ya en ese momento supe que Dios quería que fuera ahí a estudiar, pero al principio no quería, tenía otros planes para mi vida. Yo quería viajar, conocer otros países, otras culturas, disfrutar mi vida. Y pensé que si me iba a estudiar ahí ya no tendría la oportunidad para disfrutar mi vida, porque iba a cambiar. Pero el año pasado decidí que quería hacer la voluntad de Dios, así que fui a Monte, a Argentina, y desde que llegué Dios empezó a obrar en mi vida, a cambiar todos mis principios, todas mis convicciones, todo. Yo me convertí a los 4 años, y siempre fui a la iglesia, siempre escuché de Dios, siempre participé de los ministerios y todo, pero no me di cuenta de que no tenía convicciones propias. Cuando vine acá me di cuenta de todo eso. Siempre estaba en la iglesia, participaba, todo, pero no tenía mis propias convicciones y no tenía comunión con Dios. Así que empecé a cambiar eso, a tener comunión con Dios, a tener una relación personal con Él, y Dios está cambiando mi vida totalmente. Me doy cuenta de que no son las cosas del mundo las que nos satisfacen, las que nos dan paz, alegría, ni nada de eso, sino que es solo Dios. A veces me cuesta estar tan lejos de mi casa y que todos mis amigos y mi familia estén en Suiza y tengan una vida más fácil que acá, porque en Europa el estándar de vida es un poco más alto, es más fácil estar ahí porque tenés todo, y acá no. Pero me di cuenta de que esas cosas no te llenan y que no es con el objetivo de tener esas cosas que estamos acá, sino que Dios puede darnos todo lo que necesitamos, no necesitamos nada del mundo.

Victoria: O sea que aquellas cosas que pensabas que eran disfrutar la vida hoy las ves de otra manera, las ves desde otro lugar.

Joscheba: Y se que solo las puedo disfrutar con Dios, estando en su voluntad.

Victoria: ¿Y vos, Lisa?

Lisa: Sí, yo desde que recibí a Jesús que quería ir a un instituto bíblico, pero nunca era el tiempo correcto. En mi familia era muy difícil porque mi mamá se murió y por eso yo estaba en el lugar de mi mamá. Tengo también hermanos menores y por eso era muy importante que yo estuviera en ese lugar de una mamá para ellos. Pero siempre oré para poder ir a un instituto bíblico. El año pasado yo oré especialmente por eso, porque mi hermano me dijo: “Yo estoy bien. ¿Qué querés vos? ¿Qué querés con tu vida, qué querés hacer?”. Así que empecé a orar por un instituto y visité institutos en Alemania, pero no me parecía que era la voluntad de Dios.

Victoria: No era lo que estabas buscando.

Lisa: Si, exactamente. Un día, en el mes de febrero, oré mucho y al día siguiente recibí un folleto de Palabra de Vida, pero yo pensé: “No, Argentina no, qué lejos”. Pero yo oré especialmente por este instituto y hablé con el que dirige el programa bilingüe, y decidí venir al instituto. Después de decidir recibir a Jesús, esta ha sido mi mejor decisión.

Victoria: Qué bien, qué lindo. Además del momento que están viviendo con el Señor las dos, una cosa es venir por un tiempo y hacer una visita, y otra cosa es quedarse a estudiar y tener que vivir en una cultura diferente. ¿Cómo ha sido eso para ustedes?

Lisa: Para mí fue muy difícil porque dejé a mi familia en Alemania, que es muy lejos. También por mi forma de vida, porque mi vida era muy cómoda, yo trabajaba y tenía todas las cosas. Pero acá vivo con mucha gente en un lugar que es grande, pero que con tanta gente se hace pequeño, y también hablan otro idioma que no sabés hablar muy bien, y eso es muy difícil. Pero Dios siempre tiene un plan, y estoy segura de que este es el plan de Dios para mí porque Él siempre abrió el camino y me ayudó en todas las cosas.

Victoria: Vas pudiendo superar las distintas limitaciones que vas enfrentando.

Lisa: Sí, exactamente.

Victoria: Bien. ¿Joscheba?

Joscheba: Sí, para mí también es difícil pero no tanto como al principio cuando tuve ese choque cultural. Pero nunca te vas a sentir parte de la cultura como si fuera la tuya. Yo nunca me voy a sentir tanto parte de la cultura de Argentina como me siento de la cultura suiza, porque Suiza es mi país. Pero eso no es lo que importa. No importan las culturas, no importan los países, no importan los lugares o personas que están alrededor tuyo, solo importa Dios. Y podés estar en cualquier lado, pero si no estás en la voluntad de Dios no te vas a sentir bien. Incluso si estás lejos de tu casa también te puedes sentir feliz y sentir que estás en la voluntad de Dios. Ahí te das cuenta de que no son las cosas terrenales las que aportan, sino que es Dios y lo invisible.

Victoria: Cuéntenos, ¿cómo ha sido el contacto con las personas de las distintas iglesias que han estado visitando con Palabra de Vida? Nos decían que han tenido trabajo con los niños, ¿es así? ¿Cómo ha sido eso para ustedes?

Joscheba: Bueno, el sábado hicimos tres horitas felices con niños de barrios más pobres y fue impresionante ver cómo nos recibieron. Con mucho amor, muy abiertos, fue muy lindo. Para ellos es muy interesante ver gente de otros países, de otras culturas, porque creo que acá no vienen muchas personas de Alemania y Suiza. Fue realmente muy lindo.

Lisa: Sí, para mí también fue muy lindo. Claro, evangelizar acá es diferente que hacerlo en Alemania. Acá ya es suficiente con que tengas juegos, con que tengas una sonrisa, con que quieras contarles una historia de Jesús, y ya tienes la atención de los niños. Eso para mí fue muy lindo de ver.

Joscheba: Sí, no hace falta hacer tanto programa.

Victoria: Claro, captar la atención de los niños, tener un contacto con ellos es mucho más fácil, ¿no?

Lisa: Sí.

Victoria: Bueno, esperamos que se lleven bonitas experiencias y algunos testimonios de esos niños también. ¿Cuáles son sus planes a futuro?

Lisa: Para mí, al principio, cuando me despedí de mi familia y de mis amigos en Alemania, les dije que nos veíamos otra vez en julio, porque iba a volver en Alemania. Eso era seguro, ya estaba decidido, tenía también un trabajo que iba a empezar, pero durante estos meses Dios cambió mi plan completamente. Ahora quiero estudiar hasta diciembre y terminar el primer año, y después no sé todavía. Para las vacaciones sí voy a volver a visitar a mi familia, pero ahora quiero estar acá.

Victoria: Lisa, estamos hablando de Jesús como alguien con quien tenemos contacto todos los días, pero de repente alguien que nos está escuchando no sabe bien de quién estamos hablando, o cuando piensan en Jesús piensan en un personaje histórico, piensan en la cruz, tal vez tienen la idea de haberlo visto en alguna imagen o en algún cuadro, pero ¿qué es Jesús para vos?

Lisa: Jesús es mi poder, mi fuerza. Yo siempre empiezo la mañana leyendo, orando con Jesús y dejando todas mis cosas, mis problemas y mis preocupaciones en sus manos. Es difícil explicar cómo es Jesús, pero es muy importante tener una relación con él. Para mí es re importante en la mañana empezar siempre orando y leyendo la Biblia, porque esa es su palabra. También si necesito un consejo o algo así, siempre voy a buscar en la Biblia, en su Palabra. Pero también es difícil, porque somos humanos y siempre queremos ver a la persona con la que estamos hablando, o queremos tener un consejo que es muy claro, y eso no es así, sino que tenemos que escuchar y prestar atención a las cosas pequeñas. Por eso para mí es muy importante la historia de Jesús y Pedro cuando Pedro quiere ver a Jesús y caminar hacia él sobre el agua. Por eso en la Biblia podemos encontrar en Mateo 14:28-29 que dice: “Entonces le respondió Pedro, y dijo: Señor, si eres tú, manda que yo vaya a ti sobre las aguas. Y él dijo: Ven. Y descendiendo Pedro de la barca, andaba sobre las aguas para ir a Jesús”. Pero después empieza a soplar el viento, y él tiene miedo. Muchas veces a mí también me pasa. Antes de venir a estudiar acá tuve mucho miedo, porque pensaba: “qué va a pasar con mi familia, con mis amigos que no son cristianos”, pero esa no es mi responsabilidad, es responsabilidad de Jesús. Yo soy su instrumento, pero la responsabilidad es de Jesús. Por eso después en el versículo 30 dice: “Pero al ver el fuerte viento, tuvo miedo; y comenzando a hundirse, dio voces, diciendo: ¡Señor, sálvame! Al momento Jesús, extendiendo la mano, asió de él, y le dijo: ¡Hombre de poca fe! ¿Por qué dudaste?” Y es así. Muchas veces yo también tengo poca fe. Pero Dios siempre me da una mano para ayudarme. Eso es Jesús para mí, es mi esperanza.

Victoria: Joscheba, ¿algo que quieras decir?

Joscheba: Para mí Jesús es la única verdad y el único que puede dar sentido a mi vida. Sin tener una relación con él mi vida no tiene ningún sentido, pero cuando yo le dejo entrar a mi vida Él me da un sentido. Él es el sostén en las tormentas de mi vida. Es la decisión de cada uno si quieren dejar entrar a Jesús, pero cuando lo haces tenés una vida totalmente diferente. No necesariamente más fácil, pero más interesante y con sentido.

Victoria: Y con respuestas también, aunque muchas veces no sean directas pero uno comienza a entender un poco de lo que se trata la vida en realidad, ¿no?

Joscheba: Sí.

Victoria: Chicas, muchas gracias por estar con nosotros, ha sido un gusto conversar con ustedes. A nuestras amigas las invitamos a que sigan escuchando Entre Amigas y que no se pierdan del próximo programa. ¡Hasta la próxima!