Integridad (1ª parte)
30 diciembre, 2015Sentirse bien, llevarse bien
30 diciembre, 2015¿Hay alguna diferencia entre la integridad del mundo y la del cristiano?… ¿qué crees tú?… Daniel Montenegro, psicólogo, licenciado en teología, pastor y coordinador del Instituto Haggai para Latinoamérica nos da una rápida mirada sobre el cómo debe el cristiano vivir la integridad…
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EA621 – Entre Amigas –
Integridad (2ª parte)
Receta: Sopa Minestrone
Entrevista a Daniel Montenegro
Sandra: Estamos con Daniel Montenegro que es el coordinador para América latina del Instituto Haggai. El esta visitando Uruguay y brindando unos cursos. En el programa anterior hablamos sobre una introducción al tema de la integridad, y nos gustaría si es posible compartir con nuestras amigas algo de lo que se brinda en el curso.
Daniel: Desde la perspectiva como creyentes este tema toma importancia, porque la integridad se ha conceptuado como que únicamente la gente que esta dentro de la iglesia, o dentro de ciertas actividades especiales la puede llevar adelante. Pero si vamos al término como tal hay una división de la palabra. En cuanto como la conceptúa la Palabra de Dios y como la conceptúa el mundo secular. Mientras que el concepto que existe de la palabra Integridad en el mundo se entiende por estar completo, oxea cumplir, una persona que es cabal. Esto permite que personas que no tengan nada que ver con la iglesia puedan ser integras. Inclusos capos de la droga, políticos pueden ser íntegros. Es gente que cumple con lo que prometió, sin importar cuales sean sus objetivos.
Pero desde la perspectiva bíblica encontramos que integridad no es lo mismo. Ya no es el ser cabal, o estar completo sino que tiene una profundidad tal que como lo dice la Palabra de Dios, Sed santos como Yo soy santo. La integridad tiene una connotación con la santidad.
Sandra: ¿Tiene que ver con lo que Dios pide de nosotros y no tanto en que tengamos esa coherencia entre lo que pensamos y lo que hacemos. Sino el ser coherentes con lo que Dios quiere?
Daniel: Hay se presta un juego muy interesante para la mente y el corazón. Porque ¿Qué es realmente lo que Dios pide de nosotros? ¿Qué es lo que en realidad estamos llamados a llevar acabo como creyentes?
La demanda de Dios no va a que seamos íntegros como un requisito, sino que la integridad va a ser una consecuencia de algo que es básico y es entender para qué somos llamados.
Dios nos llama a ser a fidelidad, entonces si tu le eres fiel, eres integro.
La palabra Integridad tiene una relación muy estrecha con la palabra fidelidad y con el amor. Si tu amas a Dios, tu le vas a ser fiel y por consecuencia tu eres integro en la relación con el. Es como en el matrimonio cuando el esposo ama a la esposa la evidencia de ese amor va a ser la fidelidad. Pero por causa de la fidelidad que profesan tanto el esposo como la esposa se va a dar un ambiente de integridad en el hogar. El resultado es que van a vivir con integridad. Todo parte de la relación de fidelidad.
Sandra: ¿Esto es un tema de oración o de preocupación de usted? Porque cuando habla de esto en el curso sin dudad solo Dios sabe lo que pasa por el corazón de los alumnos, y no hay forma de medirlo.
Daniel: Sin duda que no hay forma de medirlo pero creo que nuestra preocupación como expositores es que el público aprenda. Y no podemos ir más allá, porque luego el que debe operar es el Espíritu Santo. Lo que creo como expositor es que mientras estamos transmitiendo algunas enseñanzas el que deberás esta obrando en el público es el Espíritu Santo y no mis palabras. El es el que les va a abrir el entendimiento, los va a dirigir y los va a convencer de lo que no están haciendo bien. Como maestros tenemos la responsabilidad de entregar el tema, y no la preocupación de medir si van a poder cumplir o no con ciertas propuestas del curso mismo. Porque como decía eso es trabajo del Espíritu Santo. Sin embargo por amor a los hermanos creemos que eso va a acontecer porque sin duda que antes de dar cualquier clase la ponemos delante de Dios, oramos por ello y sabemos que es El el que nos esta guiando. Es Dios el que nos esta iluminando la mente y por lo tanto es El que hará la obra. Sobre todo en este tema de la integridad necesitamos que nos habrá la mente porque yo se que les moví un poco el piso cuando les digo que el evangelio no apunta al corazón. Porque como creyentes decimos que Dios toque su corazón, pero la Biblia nos dice que el corazón es lo mas engañoso y perverso que hay. El evangelio apunta a un evangelio que se razona. Que piensa cual es el plan de Dios para que entre a la mente de una manera que no sea manipulado. Sino que se pueda comprender como dice la palabra de Dios en Romanos 12:2 Que sean transformado por medio de la renovación de vuestro entendimiento. ¿Pero para que? Para poder comprobar la buena voluntad que Dios tiene para con tu vida. Si se comprueba la buena voluntad para tu vida, se comprueba que lo que Dios quiere es que vivas una vida integra. Pero eso va a venir como causa del conocimiento pleno que tienes de la Palabra de Dios y que se lleva a la práctica. Porque si es un conocimiento que no se puede llevar a la práctica, únicamente es teoría. El evangelio no es Teoría. Un cocimiento pleno es algo que tu conocer, entiendes, comprendes y como lo comprendes lo llevas a la practica y eso establece la diferencia.
Sandra: ¿Que pasa cuando vemos actitudes que son incoherentes con lo que se profesa?
Daniel: Yo creo que lo que pases es que como seres humanos somos personas vulnerables. Debemos ser consientes que mientras nosotros estemos de paso por esta vida, si tenemos ese propósito de llegar a la plenitud de Cristo pero como dice Pablo: No pretendo haberlo alcanzado ya. Estamos llamados a esa Santidad pero mas vale que estemos atentos a que es un proceso que Dios esta haciendo en nuestras vidas. Es un proceso de santidad. ¿Cómo podríamos probar cuan santa tu eres? No existe un santometro. La palabra Santidad como tal se deriva una palabra en Hebreo que significa separar o apartar ¿Pero separar para que? Para algo bien especifico que es servir. El servir te santifica y el ejemplo lo tenemos en los utensilios que se usaban dentro del templo en el altar Santo. Los utensilillos eran comunes y corrientes pero lo que establecía la diferencia era en el lugar donde estaban y para que se usaban. El hecho de estar puestos en el altar los elevaba a otra categoría porque están al servicio de Jehová. Así tu vida y la mía cuando nosotros estamos a servicio de Dios estamos posibilitando la oportunidad de santificar nuestras vidas. Porque el servicio no solo te da la oportunidad se santificar tu vida, sino que también te impone la necesidad que te mantengas puro para hacer un buen servicio ante aquel que te ha llamado. Partiendo de esta base, la santidad se va a notar a medida de que tú sirvas a Cristo.
Hay mucha gente que habla de este tema como concepto, pero no con un espíritu de servicio. Entonces lo tenemos como un concepto y no como un principio. La diferencia entre el concepto y el principio es que si tú conceptúas las cosas de una manera más que un beneficio puede ser un problema. Porque aun en las iglesias los mayores conflictos se dan porque los hermanos no viven por principios sino por conceptos. Ejemplo: El mismo servicio cuando se conceptúa difiere de una persona a otra y termina en un problema mas que en una bendición.
Sandra: Pensando en el análisis practico que podemos hacer sobre las vidas que no demuestran este tema, cuando vemos a un hermano ¿Le decimos, le mostramos con la Biblia, oramos por el? ¿Cómo podemos hacer para ver esta realidad en la iglesia? Si veo que un hermano no esta actuando bajo estos principios de servicio y de amor, como cristianos ¿Qué tenemos que hacer?
Daniel: En el curso hablamos un poco sobre esto. A esto le llamamos ética de diferenciación. Se habla que la iglesia es uno de los elemento clave porque hay tres principios básicos que ayudan al desarrolla de la integridad de la persona. Esos tres elementos son el Espíritu Santo, La Palabra de Dios (La Biblia) y la Iglesia. El Espíritu Santo que no se detiene hasta que no este conforme a la estatura de la medida de Cristo. La Palabra de Dios es el matriz, es la que te nutre, la que te enseña. Y esta la Iglesia que es la comunidad en la cual la gente que esta en el mundo, viene a aprender los nuevos modelos que hay en Cristo. Por causa de que los que ya están adentro tienen una ética distinta y una manera de vivir diferente. Esos modelos que están dentro de la iglesia tienen la responsabilidad de cambiar a los que viene. Si en la iglesia hay chismosos, corruptos, violentos, mal hablados, viciosos y demás. Es porque los modelos que hay en la iglesia ya no son suficientes para ayudar a cambiar las vidas de los que vienen. El trabajo lo hace el Espíritu Santo. Es obra del Señor Jesucristo, pero los que impactan a la gente son las personas, los miembros de la congregación. Porque la gente necesita ver modelos de Cristo en vivo. Al Señor Jesucristo no lo pueden ver, pero si a ti o a mi. Y al mirarnos pueden ver que somos capaces de soportar las pruebas, de carácter templado y si hay posibilidades de hacer algo deshonesto no lo hacemos. Pueden ver una persona que no tiene doble vida, que su vida esta abierta para que todo el mundo vea lo que en ella hay. Todo eso es un ejemplo en vivo que a mi me reta para ser igual. Pero tiene que ser de tal manera que no sea una apariencia para poder provocar el apego. Aquello de yo quiero ser igual a ti. El modelo me arrastra. Pero si los modelos que están viendo son nada mas ritualistas, donde la gente asiste a al iglesia porque cumple un ritual y no hay cambios. Entonces en la iglesia si va a seguir existiendo los chismoso y corruptos porque no hay ningún modelo que arrastre. La responsabilidad es de todos los miembros de la iglesia, que impacten con sus vidas, que huelan a Cristo. Si es verdad que hay lugares donde el ambiente apesta habiendo cristianos, y no debería ser así. Deberían olor a Cristo.
Sandra: Así es que el desafío sea este, de olor como Cristo. Que podamos contagiar a los demás con el amor de Jesús.