Mil programas de Entre Amigas

En el programa número 1000 de Entre Amigas escuchamos el saludo de dos amigas que estuvieron desde el principio: Sonja Maag y Sandra Costabel. Te invitamos a conocer sobre el origen del programa, cómo Dios fue marcando su voluntad y abriendo puertas, y algunas anécdotas del trabajo radial en Uruguay. Vemos, una vez más, la fidelidad de Dios para con aquellos que lo buscan.

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EA1000 – Entre Amigas –
Mil programas de Entre Amigas

Entrevista a Sandra Costabel y Sonja Maag

Victoria: Amigas, es un gusto compartir esta celebración de los 1000 programas de Entre Amigas. Hoy estaremos conversando con las invitadas que van a compartir su experiencia en el trabajo de la producción del programa. Es impresionante pensar en los años en los que ha estado Entre Amigas y en los diferentes formatos por los que ha pasado también, así que es una sorpresa llegar a los 1000 programas pero también es una muestra de la fidelidad de Dios. Vamos a estar hablando con Sandra Costabel, quien ya es abuela, y con Sonja Maag, que vive actualmente en Suiza. Primeramente vamos a escuchar a Sandra Costabel.

Sandra: ¿Qué tal queridas amigas? Les habla Sandra Costabel, no sé si ustedes me recordarán, quizás si son oyentes de hace tiempo de Entre Amigas. Yo fui una de las amigas que estuvo en la conducción durante unos cuantos años, deben haber sido unos 10 o 12 años, junto a Natalia López en la producción del programa. Me pidieron que contara alguna anécdota, algún recuerdo, algo que se me venga a le memoria. Primeramente quiero comentarles lo que fue el trío de las Entre Amigas. Si bien considerábamos que las amigas eran todas las oyentes que se unían a este club a través del programa, sin duda formábamos a través de la producción y la conducción un trío de tres mujeres muy locas, con muchas ideas. Una de ellas es Sonja Maag, que en este momento está viviendo en Europa, disfrutando de sus nietas, pero que muchos años vivió como misionera en Uruguay. Ella tuvo un deseo muy fuerte en su corazón de poder trabajar para las mujeres y creo que lo sigue haciendo desde su iglesia en Europa. Pero bueno, esta idea de tener un programa radial exclusivo para las mujeres creo que fue su idea, trabajó con un equipo previo al equipo de Natalia López y yo, y luego vino la renovación, no me acuerdo por qué, y arrancamos, muy jovencitas.

Natalia más joven todavía, tiene 10 años menos que yo. Y bueno, ahí arrancamos con mucha inexperiencia pero con todas las ganas, indudablemente con una vocación radial ambas, Natalia había estudiado locución así que tenía una profesionalidad en su decir y una voz privilegiada, además, pero bueno, así empezamos. Nosotros teníamos una radio de Llamada de Medianoche en el interior de Uruguay, en Treinta y Tres, y cuando escuchábamos que se repetían programas viejos causaba mucha risa escucharnos con esas voces de gurisas chicas. Gurisas le decimos en Uruguay a las jovencitas, a las niñas. Con voces aniñadas y con una estructura muy cuadradita, poco espontánea, podríamos decir, pero con los años fuimos aceitando esa manera de trabajar de manera que nos entendíamos con solo mirarnos.

De todos modos, este trío que formamos Natalia López, Sonja y yo, formó también una amistad. Era interesante porque Sonja me lleva 10 años a mí y yo le llevo 10 años a Natalia, sin embargo éramos tres generaciones que podíamos compartir y pensar ideas juntas para el programa y por lo tanto para las amigas. En este momento ambas viven en Europa, solo yo quedo en Uruguay, y sería lindo, de hecho antes de la pandemia estaba planificando poder visitar el viejo continente, como le decimos acá en América Latina, y poder verlas a las dos. Pero bueno, ya llegará el momento de encontrarnos y de hacer una reunión, como hacíamos antes, para tomar un té, para salir a comer algo, para festejar los tantos programas. Parece mentira que estamos celebrando tanta cantidad de programas de Entre Amigas, y es notorio que esto es un proyecto de Dios porque no depende de que fuera tal la conductora o tal otra, sino que hemos ido pasando varias y el programa persiste para beneficio de todos aquellos que escuchan.

Otra cosa para comentarles antes de cerrar este saludo es que nuestro entrenamiento de trabajar tanto juntas llevó a que pudiéramos mantener un programa de Entre Amigas en formato en vivo, en formato semanal en la ciudad de Montevideo en una radio muy escuchada AM que abarcaba prácticamente la mitad del país, del territorio nacional, y eso también era un desafío. Cada domingo en la mañana nos levantábamos bien tempranito las tres e íbamos a esta radio, teníamos esta programación que también, en su comienzo, por lo menos yo, estaba muy nerviosa y estructurada, pendiente de los minutos que pasaban y tratando de aprovechar bien el tiempo, pero después se fue generando una dinámica muy natural y fue una super experiencia, me pareció una muy linda experiencia.

En Entre Amigas cursé el embarazo de mi hijo más chico, me acuerdo de que grabé hasta que tenía una panza enorme, estaba casi por tenerlo y teníamos muchísimas horas de grabación, me quedaba tendida arriba de la mesa del cansancio, pero era un esfuerzo que hacíamos con gusto, sabíamos que había mucha gente de diferentes lugares del continente que escribía, que consultaba por problemas que tenía, que consultaba por cosas que les habían impactado del programa y sabíamos, a través de estos comentarios, que era un programa útil y que era utilizado por Dios para beneficio de su reino. Así que estoy feliz de saber que el programa sigue al aire, feliz de saber que fuimos parte de esta historia, y deseo que siga al aire por mucho, mucho tiempo más. Feliz celebración de tantos programas, un saludo enorme a las amigas de siempre.

Victoria: Qué gusto escuchar a Sandra, la verdad. A continuación vamos a hablar con Sonja Maag. En lo personal Sonja fue quien me acercó a Entre Amigas, yo estaba colaborando con la Revista Radial, cuando tenía otro formato, y en un momento Sonia tenía que hacer un viaje extenso y me propuso el tema de la producción de Entre Amigas, todo un desafío pero así fue como comencé. La primera vez que vine estaba Natalia, estaba Victoria, estaba Sonja, y así empecé a salir de detrás de micrófonos y empecé a estar un poquito más presente en lo que es la voz. Ya hacen 5 años de eso y bueno, el tema de poder llegar a las mujeres que tal vez están en un entorno rural o están en un lugar al que solamente llega la radio es algo que siempre me dio mucha satisfacción y motivación también, para poder buscar los temas y conseguirlos más allá de que a veces se hace difícil conseguir a personas o conseguir entrevistas, siempre eso es una motivación, el poder llegar a aquellas personas que tal vez lo único que tienen es una radio como medio de información y de comunicación cerca.

Así que bueno, ahora vamos a estar hablando con Sonja, quien fue la que tuvo la idea de Entre Amigas junto con otras personas que estuvieron en el equipo como Natalia López, Sandra Costabel, Rocío Ledesma, Laura Ballester, también, quien en este momento nos está ayudando por allí en algunos momentos y también Paola Sanchis, que cuando puede también está colaborando con nosotras. Así que si les parece vamos a escuchar a Sonja y su saludo en este programa número 1000 de Entre Amigas.

Sonja: Mil programas de Entre Amigas, parece increíble. Solamente podemos decir “hasta aquí el Señor nos ha ayudado y grande es su fidelidad”. Me llena de mucho agradecimiento hacia Dios pensar en cómo Él cumple con sus promesas, y en cómo ha bendecido los comienzos de la producción del programa de Entre Amigas, paso tras paso, hace más de 20 años atrás. Un sueño se hizo realidad. Recuerdo muy bien cómo, durante unas vacaciones, el Señor nos mostró a mi esposo y a mí que sería importante ampliar la programación que Llamada de Medianoche ofrece a las distintas radios con programas específicos, como es el ejemplo de Entre Amigas: Un programa especial para la mujer. Oramos, buscamos a hermanas para la producción y como locutoras, y poco a poco se formó el proyecto y nació el programa que ustedes hoy conocen como Entre Amigas.

Siempre ha sido nuestro anhelo servir a las mujeres a través de este programa. Servirles con información útil para la cocina y la casa, información profesional y consejos para las distintas áreas y etapas que nos tocan vivir durante nuestra vida. Mujeres jóvenes, por ejemplo, educando a sus hijos, o mujeres maduras, con sus desafíos. Por otro lado, mujeres solas, y otras con matrimonios complicados. O mujeres buscando el rumbo de su vida, y otras, ya ancianas, en su última etapa de vida en esta Tierra. Jóvenes que buscan una vocación para su vida y otras mujeres que luchan, por ejemplo, con la salud, con sus emociones o con problemas económicos. Podríamos ampliar aún más esta lista, pero sobre todas las cosas nuestro anhelo siempre ha sido mostrar que la Palabra de Dios nos aconseja, que la Palabra de Dios nos enseña y nos edifica, que la Palabra de Dios nos bendice y que es importante estudiarla para conocer más y más a Jesús, el salvador del mundo, y el salvador de cada mujer que lo acepta por fe en su corazón. Y lo hemos podido compartir a través de los poemas y estudios, por ejemplo, de las mujeres de la Biblia, y estudios que compartimos en cada programa porque todos los temas que hemos podido trabajar los trabajamos como mujeres cristianas que somos, mujeres cristianas que buscamos la sabiduría en la Palabra de Dios.

Saben, he viajado mucho debido a mi ministerio y he conocido a muchas mujeres de distintos países y culturas, pero hay inquietudes que van más allá de estas características que representan a cada nación y pueblo. Todas, todas las mujeres buscamos y necesitamos paz. Paz profunda para esta vida y seguridad acerca de lo que ha de venir. Esto solamente lo encontramos en Jesucristo.

Me pidieron un breve saludo para compartir, así que quiero terminar con agradecimiento. Agradecimiento, en primer lugar, a Dios por su fidelidad durante estos 1000 programas de Entre Amigas, y agradecimiento a cada una de mis hermanas y hermanos de la fe que han trabajado con la producción, la locución y la edición de los programas y otros tipos de preparativos que necesitamos para terminar este trabajo y esta entrega de cada Entre Amigas. Algunos apoyaron el ministerio durante meses, otros durante años, fielmente. Otros apoyaron puntualmente con el tema que desarrollaron para los oyentes. Saben, hay muchas anécdotas para contar. ¡Cómo nos reímos juntas, tanto que en ocasiones hasta que tuvimos parar la grabación porque no podíamos seguir grabando de la risa! O ¡Cómo hemos llorado juntas, recuerdo, con temas difíciles! Pero ¡cómo hemos orado para que Dios guíe en toda la planificación, en cada grabación y en todos estos trabajos!

Hemos orado mucho para que Dios use estos programas de Entre Amigas para que muchas mujeres puedan descubrir la riqueza de la Biblia, de la Palabra de Dios, y que muchas mujeres puedan entender que Jesús es el buen pastor, el que ha dicho “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar”. Personalmente deseo que el equipo que sigue trabajando para el programa Entre Amigas pueda experimentar en la producción de cada programa cómo Dios guía, y que Entre Amigas pueda seguir siendo de bendición para muchas oyentes, cristianas y no cristianas. Por eso termino con la siguiente invitación de la Biblia: “Mantengámonos firmes, sin titubear, en la esperanza que afirmamos. Porque se puede confiar en que Dios cumplirá su promesa”.

Victoria: Bueno, así pasaba entonces esta reflexión, este saludo de Sonja Maag. Gracias, amigas, por acompañarnos en este programa número 1000. ¡Hasta la próxima!