Piloteando Una familia

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Título: Piloteando Una familia

Autor: FamiliaBISIO
No.: EA222

Juntos descubramos la clave para pilotear una familia de la mano de Amelia y Ricardo Bisio. Un programa lleno de interesantes enseñanzas!



 


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ea222.mp3 



 


Entrevista con RicardoBisio y Amelia

Sandra: Mis queridas amigas ha llegado el momento de tener nuestra entrevista, de tener nuestra visita como siempre, aprontar la mesa, aprontar todos los elementos de la bienvenida y pronto creo que vamos a empezar a poner en práctica la receta que da Natalia para poder servir en esta mesa de trabajo y poder así agasajar a nuestros amigos. En este caso estamos recibiendo a una pareja que viene de Argentina y ellos se llaman así, son la Familia Bisio, él se llama Ricardo Bisio él es pastor y psicólogo y su esposa Amelia Geramsimshuk que nos visitan y que tienen tanto para contarnos. Porque ellos trabajan en el área de la Familia y sin duda esta es un área que merece de mucha reflexión y mucho cuidado de nuestra parte. Especialmente en estos tiempos que se están viviendo muchos cambios y que la familia necesita especialmente la atención de los cristianos y que podamos mostrar cosas distintas con respecto a la familia ¿verdad? Muy bienvenidos.

Ricardo: Gracias por permitirnos estar con ustedes y comunicarnos con toda la gente que esté escuchando. Evidentemente tienes razón, el tema de la familia es muy amplio es un tema de actualidad y más cuando vemos a las familias que están en crisis hoy en día. Yo creo que hemos olvidado el proyecto de Dios nos hemos olvidado de ese proyecto maravilloso en el cual Dios permitió que una familia fuera aquella entidad en donde se pueda formar una persona. Y yo creo que nos olvidamos del privilegio enorme de transformar o de servir de canal de bendición a la vida de una persona en el futuro. Todo lo que nosotros hagamos ahora bendice ayuda o no a un ser en formación. Lo que nuestros hijos sean mañana es lo que están recibiendo hoy.

Sandra: Ustedes trabajan en diferentes lugares, digamos, Dios los ha puesto en diferentes lugares. Nos pueden contar de su reciente experiencia también en un programa radial como nosotros, nos pueden contar de su experiencia en el pastorado de una iglesia, nos puede contar Ricardo, tal vez de su experiencia como Psicólogo. Y también como Padres, y vaya si podemos decir como padres porque han pasado por su casa como hijos de ustedes muchísimos niños, algunos propios, otros que los han tenido por un tiempo. ¿En cual de estos ministerios ustedes han sentido más la crisis de la familia.?

Ricardo: Yo creo que , ahora la dejo a Amelia que es la que ha el trabajo. Hubieron chicos que estuvieron con nosotros y hay chicos que desde ese trabajo permanecen con nosotros. Es decir, nosotros hemos adoptado 5 hijos y hemos tenido 3 hijos Biológicos y a los 8 los hemos visto desarrollarse y ahora ya son hombres y mujeres salvo los mas chicos que los mas chicos tienen 19 y 20 años el resto está casado con su familia y hemos visto la posibilidad de transformación de estos chicos por el poder de Dios. Hay muchas cosas que dirás ¿Cuáles fueron los motivos? A veces cuando uno piensa en los motivos tiene la tendencia a acusar a desvalorizar las conductas de los otros. Yo creo que una de las cosas fundamentales es la no conciencia de la responsabilidad y de no pensar que un hijo es un elemento no demasiado importante solamente como para tenerlo por tener. Un hijo es algo enviado por Dios y por tanto yo debo tenerle con el mayor de los cuidados y tener conciencia de esa responsabilidad y privilegio.

Sandra: Amelia: ¿Dónde se ve el mayor dolor? ¿Dónde lo ves? En las respuestas de las mujeres en el programa radial, en estas madres que quizás conociste de los hijos que criaste, en donde?

Amelia: Yo creo que este es un tema bastante difícil también porque pensamos este trabajo comenzó como una aventura o por emoción pero después nos dimos cuenta de que era tan difícil que criar hijos propios. Y lo que nos ha resultado difícil es ponernos en el lugar del chico porque se sufre mucho el abandono y fue un tiempo especial donde a veces como padres queremos hacer que los hijos hagan lo que nosotros queremos y nos olvidamos de ponernos en lugar de ellos como para comprenderlos también. Así que fueron años preciosos y un privilegio que Dios nos dio pero también como decía Ricardo la responsabilidad grande de tener en nuestras manos una vida que hay que formar , y nosotras como mujeres estamos para influenciar tanto en la vida de ellos como para construirlos o destruirlos. No es cierto? Y pensaba en todo esto y en el privilegio que como hijos de Dios, un día él nos toma en sus manos cuando lo recibimos como salvador y se cumple lo que Dios dice en Filipenses 1:20 cuando dice: que él nos acepta como somos y que tiene preparado para nosotros una obra que él va a terminar en esta tierra y para nosotros tuvo esta tarea tan preciosa tan especial, pero al mismo tiempo junto con lo que implica para este trabajo, nos ha dado las fuerzas y el tiempo necesario nos ha provisto de maneras maravillosas también pero lo más importante es saber por qué y para qué estamos criando a ese hijo y para qué estamos en la tierra. Y la respuesta la da el mismo señor cuando dice yo los he puesto en la tierra para que den fruto y ese fruto permanezca y hoy podemos ver un poquitito, un granito de arena, de este fruto que podemos poner en las manos de Dios y es un privilegio de cada madre, ir criando a un hijo y realmente asombrarnos de ver la posibilidad que Dios nos da para ir y encaminarlos en los caminos de Él. Hemos recibido mucha bendición al verlos crecer pero si no hubiera sido por la mano de Dios, la compañía de él la provisión, la compañía de nuestros hijos, no hay mayor alegría y privilegio que servir a nuestro Dios en la familia.

Sandra: Que gran desafío, yo los invito ahora a escuchar algo de música y enseguida regresamos con esta entrevista del programa de Entre Amigas.

Sandra: Bien regresamos amigas en un segundo bloque de la entrevista, estamos entrevistando al matrimonio Bisio, Ricardo y Amelia, ellos recuerdan con mucho cariño cuando hacen una evaluación de su trabajo, criando tantos hijos, un o ve en ellos la satisfacción de haber hecho una tarea importante que Dios les encomendó. Pero nosotros también nos hacemos la pregunta importante, entonces es posible porque hoy día vemos que las familias se destruyen y muchas veces hay excusas y los padres dicen: bueno, tengo que trabajar o tengo muchas cosas y por eso abandono a mis hijos por eso no estoy con ellos pero cómo puede ser ustedes vivieron en el mismo siglo que yo vivo y pasaron por su casa cuántos hijos Ricardo en un momento 50?

Ricardo: En nuestra casa llegaron a haber 30 y luego en un hogar 150 en 2 años de 0 a 5 años. Y fue posible porque como decía Amelia había una disposición de trabajo, gente que ayudó y acompañó esta tarea, pero también hubo algo que también decía ella recién en el otro Bloque es también el abandono. Y esto me lleva a pensar en las responsabilidades que tenemos nosotros porque si cada familia se detuviera a pensar la herida que le crea a un chico que abandona, y el abandono no es simplemente entregarse a una familia sustituta o una familia de familiares directos que lo quiera criar, el abandono puede ser dentro de la misma casa o l indiferencia, reclusión en un cuarto o aunque sea muy bien amueblado o el abandono en la calle en cualquier figura que nosotros podamos encontrar de esto. Lo que debemos pensar es en la responsabilidad que tenemos porque este abandono marca y marca para siempre. Y yo creo que lo que Amelia no dijo y te lo digo yo y es que a veces nos duele el dolor de los chicos. Porque ese agujero en la historia a nivel emocional, familiar y personal es muy difícil de superar, A veces con un buen trabajo de una familia que ayude a construir arriba de ese agujero para que eso quede , no olvidado pero si superado, en un nuevo proyecto para que él mismo pueda empezar a construir su propia historia lleva mucho tiempo, lleva muchas lágrimas y lleva muchas idas y vueltas que si un padre que se considera padre lo pensara un poco se daría cuenta que cualquier actitud que tome está favoreciendo o perjudicando la vida de ese hijo. Y un abandono ya sea en una nueva posibilidad dentro de la casa o en un instituto le arruina la vida para siempre. Cuesta muchísimo recuperar a un chico que tiene noción y el dolor del abandono. No es lo mismo la familia Bisio, no es lo mismo tu familia no remplaza a nadie a la familia de origen. Y por más de que tengamos mucho amor, mucha capacidad y muchas ganas, podemos ser muy buenos, muy voluntarios y ejercer el amor de Dios pero el amor y la tarea de la que se deberían haber ocupado los padres no se puede recuperar con nada. Se puede superar, pero la herida la cicatriz de ese dolor te queda. Y a veces nosotros estamos más que formando estamos deformando chicos con los pequeños y grandes abandonos que tenemos en nuestra casa. Y si vos me dijeras qué les digo a las señoras hoy: bueno, les digo, entren a preocuparse y ocuparse de sus hijos, dándoles calidad de vida dándoles presencia,. Que le chico pueda darse cuenta que el niño no ha sido olvidado, que no hay una indiferencia sino que es alguien importante dentro de la casa. No quien maneja la casa sino uno de los integrantes de la familia que se siente contenido comprendido y amado.

Sandra: ¿Cuál es la sugerencia práctica para el multi – empleo por ejemplo?

Ricardo: Nosotros venimos de un país donde esposas y esposo tienen que trabajar y gracias a Dios que trabajen. Y en este momento hay muchos abuelos que estamos reemplazando en cierta medida a los padres. Y yo prefiero un buen abuelo y antes que una muy buena señora que me venga a cuidar a mi nieto. Esa es una de las cosas que llevan a una crisis económica. La otra es que los familiares estén poco tiempo en la casa. Entonces lo que yo debo pensar es si lo que estoy haciendo me alcanza y debo también pensar qué privilegio o qué lugar le doy a la familia dentro de todo esto, si yo lo hago con el afán de que mi familia esté un poco mejor por lo menos para vivir o para subsistir como se dice en algunos lados, el chico lo puede entender, va a ver l honestidad y el compromiso del padre y la ausencia no va a ser vivida como un abandono, sino realmente vivido como una preocupación y una ocupación del padre y de la madre por satisfacer por lo menos las necesidades mínimas de esa familia.

Sandra: Y hasta el dolor a veces de dejarlos por determinado tiempo, pero bueno, explicando por qué razón se hace y si el tiempo que pueden apartar para estar juntos disfrutarlo y que sea un tiempo de compromiso con sus hijos. Escuchamos algo más de música y luego sí una aplicación más espiritual porque yo quiero hacerles una pregunta de cómo relacionamos esto con nuestra vida espiritual.


Sandra: Regresamos queridas amigas a esta entrevista que le estamos haciendo al a familia Bisio y realmente es un privilegio el entrevistar a alguien que tiene tanta experiencia, una puede hablar como madre quizás como en mi caso de 2 hijos o entrevistar a otra madre o a otro padre, pero cuando uno ha pasado por el desafío de acompañar en el crecimiento tantos hijos uno puede ver en las palabras de ustedes, puede escuchar en sus palabras experiencia. Entonces eso da cierta autoridad porque uno dice no está hablando de lo que uno puede leer en un libro. Por cuando yo hablaba en el anterior bloque de una aplicación espiritual pienso, Dios se dolió con nuestro dolor también no? Por eso lo que tu decías, nos dolemos con el dolor de nuestros hijos. ¿Cómo podemos relacionar entonces la actitud de Dios a nuestra actitud que tenemos que tener como padres?

Ricardo: Yo creo que en primer lugar tomando conciencia de lo que dice la Biblia en el salmo 127: Si Dios no edifica la casa en vano trabajan los que la edifican. Nosotros creo que estamos olvidando por la velocidad de lo que estamos viviendo y por las condicionantes sociales que no somos simplemente un cuerpo y una mente sino que también tenemos un espíritu por el cual nos conectamos u nos comunicamos con Dios y todo lo que nosotros necesitamos es justamente tener un equilibio en las 3 áreas de nuestra vida y ese equilibrio a nivel espiritual sólo puede ser logrado cuando yo tengo conciencia de que necesito el poder de Dios, la presencia de Dios en mi casa para ayudarme a edificar la casa. Hoy es muy difícil, lo decíamos en un encuentro con gente de Uruguay es muy difícil hoy en día poder ser padre y ser madre si no contamos con el auxilio de Dios. Un Dios que nos da la fuerza la capacidad el conocimiento, la sabiduría necesaria para estar con nuestros hijos, pero por otro lado ese Dios que es necesario en nuestra casa es nuestro padre celestial es un padre que entiende, un padre que me puedo comunicar con él u n padre que me provee un padre que me puede secar las lágrimas un padre que debió ocupar todo ser humano un padre que nos amó y nos sigue amando tanto que la manifestación de su persona fue la persona de Jesucristo y cuando yo hablo de esto y creo que también Amelia puede también decirlo no es simplemente una teoría sino que es una práctica. Yo no estoy hablando de una religión. Yo creo en Dios y en Jesucristo como aquél que transformó mi vida, pero también él es quien me transformó el que me dio la fuerza la capacidad y la posibilidad de encarar la vida de una forma distinta. Dios no me prohibió nada, la Biblia no te prohíbe. Yo desafío a que leas la Biblia porque la Biblia no te prohíbe. Dios a través de la Biblia te cambia la escala de valores y te da una nueva mirada a cerca de la cosas de todos los días y la Biblia como el manual del fabricante encentro elementos como para poder formar mi propia vida mi relación de pareja y la ecuación de mis hijos.

Sandra: Amelia se nos va el tiempo.

Amelia: Si lo bueno de todo esto es que hemos aprendido de que Dios no nos salva por obras, por lo que estamos haciendo sino que nos salva tal cual somos y nos preparó esta obra para que pudiéramos comentar a estos chicos del amor de Dios que es lo que llenó nuestras vidas y qué es lo que nos impulsa hacerlo por amor a Dios también.

Sandra: Amelia , quizá las mujeres que nos están escuchando piensan bueno, quizá esto es una cosa para ellos que tuvieron un hogar de chicos, chicos de ellos quizás no propios pero cuál es mi relación como madre,… quizás yo tengo mis hijos hay también un mensaje para las mujeres que quizñas no han tenido 30 chicos peor que sí tienen quizá 1 y hay una responsabilidad, un desafío para plantearle.

Amelia: Si yo creo que hoy tanto una madre que tiene un solo hijo como pudiera tener varios, vive abrumada triste cansada y siempre me ha servido en mi vida en momentos así porque siempre los tenemos sobretodo en estos tiempos difíciles que vivimos con la invitación que hace nuestro Señor Jesucristo. Vengan a mi todos los cansados y trabajados que yo los voy a hacer descansar. Y descansando en él recibimos la fuerza necesaria para enfrentar este tiempo como decía tan difícil de educar a nuestros hijos y que ellos puedan i conociendo a nuestro Dios que en primer lugar lo teneos que buscar personalmente nosotras. Sin él nada podemos hacer, yo me siento sin fuerzas yo lo necesito, por eso un día empecé a buscarlo y lo encontré en la persona en nuestro señor Jesucristo que entendí que él murió por mí lo acepté y me cambió la vida y me praraó todo esto tan precioso que piedo disfrutar hoy.

Sandra: Y en esa debilidad y en esa dependencia es que encontramos l fuerza. Muchísimas gracias por la visita.

Ricardo: No a ustedes por la invitación

Sandra: Para nosotros es breve tenerlos quince minutos nada más pero entendemos que la agenda cuando ustedes visitan un país es una agenda apretada y queremos también que ustedes cumplan también con sus demás obligaciones.- Pero muchísimas gracias por haber estado en este programa y bueno también bendecir a tantas amigas de diferentes países que nos escuchan.

Ricardo: Gracias

Amelia: Gracias

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