Redes Sociales – ¡Eso no me va a pasar! (2ª parte)

Autor: André Beitze

Cuando uno está atrapado en las redes sociales, vive fuera de la realidad, vive en un engaño. Usted dirá: “Eso no me va a pasar.” Pero, le pregunto: ¿Cuánto tiempo invierte navegando en Internet? ¿Le está robando el tiempo? ¿Cómo está su rendimiento en el colegio, la escuela, la universidad, o el trabajo? ¿Quién tiene el dominio de su vida?

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PE2316 – Estudio Bíblico
Redes Sociales – ¡Eso no me va a pasar! (2ª parte)

Estimados amigos: En todo este tema de las redes sociales, del que venimos hablando, hay una: Noticia alarmante

Y ésta es que no estamos conscientes de que estamos siendo controlados desde afuera. En el sitio de Wikipedia, podemos leer acerca de Facebook: “La más reciente inyección de capital a Facebook -27,5 millones de dólares- fue liderada por Greylock Venture Capital (fondo de inversión con fuerte vínculo con la CIA). Uno de los socios de Greylock es Howard Cox, que –según el diario The Guardian-, pertenece al fondo de inversión en capital de riesgo de la CIA.”
Esta información ya hace un tiempo que está en este portal. Y esto significa que la CIA tiene control sobre esta red social.

Tal como lo denunció en el año 2013 uno de los colaboradores de NSA (Agencia de Seguridad Nacional) de los EE.UU., por lo cual es perseguido: “El escándalo de monitoreo de la Agencia de Seguridad Nacional es el mayor de la historia”, dijo Michael Savage.

“El Washington Post informó que el motivo de las filtraciones era destapar el ‘estado de vigilancia’ existente en Estados Unidos. Para justificar la filtración, Snowden comentó que no puede ‘por cuestiones de conciencia, permitir al gobierno de EE.UU. destruir la privacidad, la libertad en Internet y las libertades básicas de la gente de todo el mundo, con esta gigantesca máquina de vigilancia que están construyendo en secreto’.”

Edward Joseph Snowden reveló lo que está sucediendo a nivel mundial por medio de las diferentes plataformas usadas en Internet, cuando dijo, hablando con The Guardian, en junio de 2013:
“No quiero vivir en una sociedad que hace este tipo de cosas… No quiero vivir en un mundo donde se registra todo lo que hago y digo. Es algo que no estoy dispuesto a apoyar o admitir.”

De manera que si usted algún día pretende viajar a EE.UU., debe tener en cuenta la información que divulgó en Facebook u otra de las diferentes redes ¬sociales, porque ésta puede bloquearle la entrada a ese país, y quién sabe cuántas otras cosas más.

Con mucha razón, durante la inauguración del ciclo escolar del año 2009, Barack Obama, el presidente de Estados Unidos, en una escuela secundaria de Wakefield, en Virginia, exhortó a los estudiantes de su país a “tener cuidado con lo que suban a Facebook” y a “no abandonar los estudios” porque “el futuro depende de ustedes.”

Además, recibí una información en la cual también se revela que todas las computadoras con sistema operativo Windows, a partir de la versión de 1995, son monitoreadas por la NSA – Agencia Nacional de Seguridad de EE.UU.

Al comienzo del año 2014 se hizo pública la noticia de que también por medio del popular juego de celulares y tablets, Angry Birds, la NSA estaba controlando el contenido de las terminales electrónicas.

¡Ahora sí que la gente está asustada!

En la novela “Tu hermano mayor te está controlando” (“Big brother is watching you”), escrita por Orwell, en 1949, él ya lo mencionaba: ‘Estamos siendo controlados desde afuera’. Pero éste sólo es un lado de la moneda.

El otro es: ¿Está la Red controlando su vida?
Le pregunto: ¿Cuánto tiempo dedica usted a las redes sociales durante un día? ¿Está pendiente de cada mensaje que entra al celular o a la computadora? Hay jóvenes que viven para estos medios de comunicación y son dominados por los mismos.

Buscan su reconocimiento, porque en realidad son personas solitarias. Cada uno busca ser alguien importante, pero la opinión de las personas cambia muy rápidamente. Un día será Like (Me gusta), el otro día recibirán un “No me gusta”. Antes también se usaba este método, pero con una margarita: me gusta, no me gusta. Solo es una cuestión de suerte, no tiene nada que ver con la realidad. Porque la realidad, es que siguen siendo personas solitarias.

Otras personas usan estas plataformas para mostrar algo que tal vez tienen o son. Como aquel muchacho me¬xicano que presumía de las propiedades que su familia poseía, y causó que extorsionistas lo detectaran, lo engañaran con una falsa identidad, lo secuestraran y exigieran más de 300.000 dólares por su rescate.

En Guatemala ya ha habido varios casos en los que jovencitas fueron involucradas en una relación sentimental virtual engañosa. Ellas fueron invitadas por sus supuestos amantes a un determinado lugar, desde donde fueron llevadas a lugares remotos, y sus cuerpos aparecieron más tarde ya sin vida.

O la noticia de un joven de 18 años que vivía en la Ciudad de Guatemala, quien se contactó con una mujer en La Esperanza, Quetzaltenango. Se enamoró de ella, y, como ella tenía necesidad económica, le pidió al joven que la auxiliara. Él llevaba consigo 3.000 quetzales cuando fue recibido por el ex esposo de esta señora, quien lo maltrató y lo quemó con gasolina. Por la gravedad de las quemaduras este joven falleció después de 5 días.

Esas noticias deberían ser una alerta para nosotros. Se está viviendo fuera de la realidad. Se está viviendo en un engaño. Tenemos también el caso de un muchacho que conoció a una supuesta chica por medio de estas plataformas, pero cuando concretaron una cita para conocerse personalmente, éste se dio cuenta de que ella era un hombre, y, lo peor del caso, es que siguieron la relación.

Usted dirá: “Eso no me va a pasar.” Pero vuelvo a preguntarle: ¿Cuánto tiempo invierte navegando en Internet? ¿Le está robando el tiempo? ¿Cómo está su rendimiento en el colegio, escuela, universidad, o trabajo? ¿Estar enchufado a la red es una constante invariable? ¿Se desvela por estar conectado y no logra librarse de esa cadena que lo amarra firmemente a esos medios de comunicación?

Una tarde, mi hija había entrado en Facebook para comunicarse con sus compañeros de colegio, por asuntos de un trabajo en grupo, y, de repente, se encontró conectada con una amiguita suya que vive en Alemania. Por la diferencia de horario, allá eran ¡las 3:00 o 4:00 de la mañana! ¡Qué locura!

¿Quién tiene el dominio de su vida?

Espero que usted no sea esa clase de persona. Usted dice ser cristiano, ¿verdad? Ser cristiano significa amar al Señor Jesús como Salvador y, ante todo, como Señor. Entonces, ¿quién debería tener el dominio de su vida? ¡El Señor Jesús! ¿En realidad lo tiene Él? ¿O lo tiene la tecnología, o lo que sea?

En Efesios 5:18, Pablo nos exhorta: “Sed pues llenos del Espíritu”. ¿En contraposición de qué Pablo menciona esto? En contraposición de embriagarse con vino. Ser lleno de algo, significa estar bajo su control. Esto se desprende claramente de Ef. 5:18: “No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del Espíritu.” Pablo usó esta analogía, porque una persona que se intoxica con alcohol, se coloca bajo su influencia y control. De la misma manera, un cristiano que se somete a la guía del Espíritu Santo que mora en él, se coloca bajo su influencia o control.

Ambas cosas pueden tener una similitud superficial. Una persona que está ebria de vino, y por lo tanto, bajo su control, tiene una capacidad de juicio truncada. Dice y hace cosas que normalmente no diría ni haría. Por otro lado, una persona llena del Espíritu Santo, y, por ende, bajo Su control, tiene una capacidad de juicio mejorada, actúa de una manera cuerda y responsable, y se goza al recordar lo que dijo y lo que hizo.

Cualquier cosa que nos llene, nos influye grandemente. Si estamos llenos de ira, ésta nos influirá hasta tal punto, que diremos y haremos cosas de las que podríamos arrepentirnos después.
Ser lleno del Espíritu Santo es, pues, estar influenciado, controlado y permeado por Él, para reflejar el carácter moral de Dios y ser fortalecidos por Su poder. Habrá en nosotros amor, -gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre y templanza: virtudes a las cuales Pablo se refirió en Gálatas 5:22 y 23, mencionándolas como Fruto del Espíritu.

Al estar bajo la influencia del Espíritu, también seremos capaces de controlar nuestra presencia en las redes sociales, de acuerdo con la voluntad del Señor – con equilibrio – o tal vez ni siquiera estaremos presentes. Y si lo estamos, nos reconocerán como cristianos renacidos, y sabrán que Jesucristo mora en nuestras vidas. No aparentaremos ser algo que en realidad no somos, tal como Pablo lo dice en Romanos 12:3: “Digo, pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener, sino que piense de sí con cordura, conforme a la medida de fe que Dios repartió a cada uno.”

Al estar llenos del Espíritu Santo no estaremos denigrando, ni marginando a nadie. En la carta a los Filipenses 2:3 y 4 leemos: “Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo; no mirando cada uno por lo suyo propio, sino cada cual también por lo de los otros.” Si nos dejamos dominar por el Espíritu del Señor, seremos capaces de hacer esto. Estaremos mirando por el bien de los demás, y no estaremos hablando mal de ellos.